La reflexión que propone este libro, señalan los autores, se articula a partir de dos ejes fundamentales del desarrollo sostenible: la dimensión social y la ambiental. Aseguran que los diferentes estudios muestran la urgencia de buscar cambios en lo que hacemos y en cómo lo hemos venido haciendo, ya que si bien la pobreza, la marginación y la desigualdad siguen siendo problemas prioritarios en el Estado de México, se han venido agravando por los efectos del uso intensivo de los recursos naturales.
Enfatizan que el dilema entre el impulso a las actividades económicas que definió la dinámica de la entidad- con el disfrute pleno de los derechos sociales y la conservación del medio ambiente aumenta la complejidad de los problemas sociales y ecológicos. Subrayan que estudiar los procesos de desarrollo a nivel municipal y estatal contribuye a tener una mejor comprensión de dicha complejidad y a proponer soluciones adecuadas. Destacan que de esta manera, se pueden diseñar políticas públicas integrales orientadas a revertir las tendencias de deterioro social y ambiental.