La escritura de este libro sobre la propia práctica académica fue realizada desde la misma perspectiva de conocimiento con que miramos toda práctica social. Su producción es, por lo tanto, un efecto de la intervención en nuestro propio hacer. La producción académica, construida a partir del trabajo docente en conjunción con las experiencias de investigación, extensión e intercambios con otros, trasciende los imaginarios de las prácticas de enseñanza y de aprendizaje como transmisión y reproducción, que muy frecuentemente dan sentido y cohesionan en la universidad.