Cómo detectar un filósofo es una introducción amena, argumentada y retórica a la Filosofía, para no filósofos. Más que un ejercicio de profundización conceptual, es un esfuerzo de salir a la superficie de la vida cotidiana, de la lista de mercado, de la película del centro comercial, de la serie de Netflix, de la resaca del sábado, de la decepción amorosa, del tropezón con un libro de Foucault o de Heidegger y poder tener allí la ocasión de una reflexión auténtica que pueda llamarse filosófica. No está escrito en un lenguaje técnico del gremio, que tanto espanta a ratos, ni nada por el estilo.
Cómo detectar un filósofo es también una oportunidad para pensar los cursos de filosofía y humanidades que en ocasiones se quedan en el cartón de las bibliografías actualizadas en lugar de darle una oportunidad a la experiencia cotidiana. No lo olvidemos, la filosofía surgió en las plazas de mercado de Atenas, no en los salones palaciegos de la academia.