Es una novela que se desarrolla en la Roma papal a mediados del siglo IXX, el protagonista es un historiador que debe realizar un trabajo investigación sobre la República Romana de 1849, gesta heroica de un grupo numeroso de patriotas italianos que logran instalar en Roma una de las democracias más progresistas de Europa, producto del voto masculino universal; la duración es por pocos meses dada la intervención armada de Francia, Austria y España a pedido del Papa Pio IX.
Los personajes abordan temas históricos, componentes mitológicos, con las diferentes corrientes filosóficas y teológicas, dándole a la fe un lugar central, analizando las diferentes formas de praxis de de la misma, donde la figura del Rey de Salem, se presenta
con el sentido de Justicia que da paz.
Es una historia de desarraigos, amor y esperanzas de una época que finaliza, el modernismo, y el comienzo de un nueva era con profundos cambios sociales, el posmodernismo, con sus diferentes vertientes.